En este último caso se trata de algo que perjudica psicológicamente a la persona y se relaciona con inconvenientes personales. Esta dimensión psicológica es una de las más recurrentes entre la población. En verdad, la inseguridad está tras estados como la sensación de rechazo, la soledad, la ansiedad social e incluso la baja autovaloración. También, entre los componentes que la determinan están desde probables traumas de la niñez hasta algo tan fácil como una mala administración de las habilidades sociales.
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La inseguridad es una sensación de indecisión, temor y falta de confianza en uno mismo y en el entorno que nos rodea. Bastante gente experimentan este sentimiento en distintas instantes de sus vidas, pero en el momento en que se convierte en un inconveniente incesante, puede perjudicar de manera negativa la calidad de vida de un individuo. La inseguridad sensible tiende a estar relacionada con la carencia de seguridad respecto al cuerpo, con la identidad y con características propias de la personalidad. Un individuo tímida, introvertida o con baja autovaloración experimentará de forma fácil una sensación de inseguridad. Es muy habitual que las inseguridades personales se nutran de los estereotipos que circulan mediante todas las etnias. Por servirnos de un ejemplo, ideas que están tras el clasismo y el "tanto tienes, tanto ales" o los roles de género sostienen a bastante gente en situaciones de sumisión y aparente incapacidad para sobrepasar ciertos límites de desarrollo personal.
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Te invito a este otro artículo en el que te explico de qué manera puedes transmitir una imagen positiva a través del lenguaje corporal. En algunas culturas, como en Occidente, se valora el contacto visual directo pues se siente como una señal de seguridad y honestidad. En cambio, en otras etnias, como en algunas partes de Asia, un contacto visual sostenido puede considerarse grosero y belicoso. Creador y emprendedor especializado en marketing digital y también inteligencia emocional. Desde 2016 me dedico a la generación de negocio online con proyectos de capacitación, afiliación y ecommerce.
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La función biológica de la sonrisa es la de crear un vínculo popular favoreciendo la confianza y descartando cualquier sensación de amenaza. Se ha comprobado que también transmite sumisión, por eso la gente que desean aparentar poder y las mujeres que desean conservar su autoridad en ámbitos expertos típicamente masculinos evitan sonreír (Welpe I. et al.). En todo caso, son variaciones muy sutiles que a menudo quedan enmascaradas por los cambios ambientales en la intensidad de la luz. También se descubrió que las neuronas espejo son las responsables de que el tamaño que nuestras pupilas se ajuste al de nuestro interlocutor, en un intento de acompasar el lenguaje corporal para producir mayor conexión. No obstante, no es nada despreciable la predominación del lenguaje del cuerpo en nuestras habilidades sociales, aparte de ser un increíble espéculo de las conmuevas reales de nuestros interlocutores. El lenguaje corporal fué objeto de mucho estudio y asimismo origen de bastantes mitos como el que dice que el 93% de la comunicación es no verbal. Esta expresión define a la perfección el término de lenguaje corporal en el juego.
Los 4 elementos de la expresión corporal
Sea que estés buscando un curso de lenguaje corporal, un libro sobre de qué manera analizar a las personas, o sencillamente deseas examinar más sobre expresión corporal y lectura corporal, este es tu punto de partida. Sumérgete en el impresionante mundo del lenguaje no verbal con nosotros y empieza a transcribir los secretos que todos llevamos escritos en nuestro comportamiento y movimientos rutinarios. La incapacidad de juzgar las expresiones sentimentales puede resultar en falta de comunicación. La gente que tienen dificultades para generar expresiones faciales (p. ej., pacientes con enfermedad de Parkinson) comentan que sus relaciones sociales se dificultan.
Al contrario, en el momento en que estamos enfadados, fruncimos el entrecejo, estrechando y acotando el campo visual para restringir a nuestro objetivo. En un año fuertemente sesgado por la propaganda política electoral y el alegato de los aspirantes, tener nociones de lenguaje corporal podría resultar por demás revelador. "Es demasiado bien difícil, puesto que los políticos suelen poner máximo cuidado en la elección de sus palabras. Someten todo lo que dicen a una censura previa y ocultan de forma cuidadosa los mensajes que no desean transmitir", apunta Gonçalvez Boggio. Pero lo cierto es que la lista de motivaciones para mentir puede resultar casi sin limites. Desde salvar una situación social incómoda -como por ejemplo una llamada muy inoportuna o indeseada- o eludir un instante de bochorno, sobre todo en frente de otra gente. A veces la patraña busca resguardar la privacidad de la persona, o un intento por supervisar información sobre la vida privada.
Mucho más que palabras
En el momento en que alguien te mira de reojo, esta conducta puede tener múltiples significados en dependencia de la situación y del lenguaje corporal generalmente. Por servirnos de un ejemplo, puede reflejar curiosidad, desconfianza, o incluso un interés romántico. Las miradas furtivas suelen ser una forma de ver sin llamar bastante la atención, de forma frecuente porque la persona que mira desea mantener cierta discreción o evitar una confrontación directa. En general, el significado de una señal no verbal especial, como algunos gestos, movimientos oculares o tono, puede depender del contexto, de los individuos involucrados y de su relación. Estos son solo algunos ejemplos que muestran cómo los movimientos de nuestras manos sirven en el día a día para expresar determinados mensajes. Este modo de leer el lenguaje corporal la usan de la misma forma todas la gente de un círculo cultural.
En estas situaciones, entender disimular pertenece a la estrategia, y esto se logra cuando la cara del jugador se expone impasible. Así, evitará que sus oponentes se hagan una idea de la mano que tiene, y podrá ganar así sea con una escalera real o un farol. Además, un jugador que domine su lenguaje corporal asimismo sabrá leer a sus contendientes. Puede ocurrir en el momento en que nos encontramos bajo presión, si algo nos causa miedo o nos abruma. La expresión corporal del temor nos deja expandir el pecho y aspirar más oxígeno, preparando el cuerpo para luchar o huir. Los ojos se amplían, aumentando el campo visual y permitiéndonos ver mucho más cosas.
